En vista de que llevo unos días con pocas ganas de ponerme a coser, voy a enseñaros algunos de los primeros trabajos que hice en madera.
Ahora hace bastante que no hago nada con este material, pero hace unos años casi todo lo que hacía era así.
Lo primero, una caja para guardar las infusiones. Teñí la madera, pinté las flores y luego lleva varias capas de barniz satinado y mucha lija para que quedara finísimo.
Esta lámpara también va teñida la parte de color madera y al final de cada brazo: varias capas de blanco, dibujo estarcido, craquelado por encima y envejecido con betún.
Aquí podéis verla más en detalle, aunque la foto está un poco borrosa.
Y con la misma técnica del craquelado, pinté el sobre de esta mesita para darle el aspecto de mármol muy viejo.